Un parque para padres

¿Cuántos de ustedes suelen llevar a sus pequeños al parque? Creo que todos, cierto; sin duda, es el plan más común que tenemos los padres para nuestros niños, pero ¿nos sentimos totalmente cómodos al hacerlo?

Esta duda surgió hace poco en mí, mientras disfrutaba de una ida al parque en familia y Eduardo Andrés se mostraba temeroso de subir a ciertos espacios por la cantidad de niños "grandes" que había en el lugar. Allí comenzó el dilema y los cuestionamientos: ¡Será que los padres de esos niños grandes no se dan cuenta de lo que hacen! ¡Esos niños son muy grandes para estar aquí! ¡Hay padres tan tranquilos!

Unos lo dicen, otros simplemente lo pensamos, lo cierto es que los parques son hechos para niños y por tanto TODOS tienen derecho a disfrutarlos; ciertamente, puede que los más pequeños se sientan intimidados y teman ser lastimados pero a la final logran compenetrase, eso lo aprendí ese día cuando al poco rato de estar en el lugar Eduardo Andrés corría y saltaba sin temor, y hasta los "grandes" lo ayudaban a subir donde no llegaba.

Un parque para padres, quizás sería aquel donde no sintamos ese susto cuando suben por primera vez al tobogán más alto, donde no hay niños "grandes" que puedan empujarlos o donde los columpios no se balanceen tan altos. Este parque no existe, así que no nos queda otro que dejar que todo fluya y disfrutar.

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